sábado, 4 de abril de 2015

Carta de despedida (Anexos de novela)

No voy a hundirme y a contar nuestra historia de amor. Porque claro está que jamás la hubo y dudo que la haya alguna vez. Todas las historias de amor, aquellas que comienzan con algo parecido a “Erase una vez” y terminan en un “felices para siempre”, no son más que puras tonterías.
Cada vez que veo tus ojos, veo en ti dulzura.
Cada que te escucho, tu voz me tranquiliza.
Cada vez que te acercas, mi corazón late irremediablemente.
Sé que te preguntaras quien soy… por que te digo esto.
No sé si tengas la menor idea o no, pero me gustaría pensar que no.
Tu amistad, si es que alguna vez te decidiste a ser mi amigo, fue la experiencia más gratificante de mi vida.
No te podría explicar porque, pero me gustas.
Hay algo en ti que me hace pensar en el futuro.
Sé que bajo esa fachada, escondes a una gran persona. No sé si te de miedo demostrarlo, si te da miedo a que te lastimen, si te da miedo sufrir. Pero como estar seguro cuando no te das la oportunidad. Sigue engañando a las personas, sigue fingiendo ser quien realmente no eres.
Eres inteligente, espontaneo, extrovertido, y no me preocupa, al contrario. Me gusta aprender de las personas.
Eres divertido e interesante sin pretenderlo siquiera.
Tengo una inmensa suerte de conocerte.

Una frase que me gusta mucho es “No puedes elegir si van a hacerte daño en este mundo, pero si eliges quien te lo hace”, y creo que está claro. Si tu deseo es lastimarme, ignorar esta carta, e incluso pretender que no existo, adelante. Creo que en estos meses me has dejado en claro que fue solo un momento y nada más. Todo fue pasión y algo más. Me deje llevar y te perdí, pero es algo que elegí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mi primer experiencia docente

Cuando comencé mi labor docente en la Escuela Luis Donaldo Colosio Murrieta fue una experiencia significativa y llena de sentimientos encon...